EL ESPECTRO ELECTROMAGNÉTICO
El objetivo de un sistema electrónico de comunicaciones es transferir información entre dos
o más lugares, cuyo nombre común es estaciones. Esto se logra convirtiendo la información
original a energía electromagnética, para transmitirla a continuación a una o más estaciones
receptoras, donde se reconvierte a su forma original. La energía electromagnética se puede
propagar en forma de voltaje o corriente, a través de un conductor o hilo metálico, o bien en
forma de ondas de radio emitidas hacia el espacio libre, o como ondas luminosas a través de
una fibra óptica. La energía electromagnética se distribuye en un intervalo casi infinito de frecuencias.
La frecuencia no es más que la cantidad de veces que sucede un movimiento periódico,
como puede ser una onda senoidal de voltaje o de corriente, durante determinado periodo. Cada
inversión completa de la onda se llama ciclo. La unidad básica de frecuencia es el hertz (Hz), y
un hertz es igual a un ciclo por segundo (1 Hz = 1 cps). En electrónica se acostumbra usar prefijos métricos para representar las grandes frecuencias. Por ejemplo, se usa el kHz (kilohertz)
para indicar miles de hertz, y el MHz (megahertz) para indicar millones de hertz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario